Carpaccio
de ternera marinada
12 h |Fácil | 4 personas
El carpaccio de ternera marinada es ideal para un aperitivo veraniego. Su elaboración es muy sencilla, pero el resultado sorprenderá a todos tus comensales por su aspecto sofisticado y exclusivo.
Selecciona una carne de alta calidad para esta receta: dado que no la vamos a cocinar, es fundamental que cumpla los estándares más exigentes y no tenga grasa, como el solomillo de ternera de Ca Na Paulina.
Acompaña las láminas de carpaccio con rúcula y queso mahonés y añádele un toque de aceite de pistacho para completar el plato de la forma más elegante y exquisita.
Elaboración
- Limpiar el solomillo de ternera. Reservar.
- Pelar y rallar la chalota, el diente de ajo (sin el germen) y el jengibre. Reservar.
- Mezclar en un bol la chalota, el ajo, el jengibre, la guindilla troceada, la panela, el vinagre, la salsa de soja y una pizca de ralladura de limón.
- Incorporar el solomillo de ternera y macerar durante una noche en la nevera. Escurrir.
- Calentar un poco de aceite en una sartén y marcar el solomillo a fuego medio-alto. Enfriar.
- Envolver la carne con film, apretando bien, y congelar durante 2 horas.
- Triturar con un procesador de alimentos 100 ml de aceite con los pistachos y una pizca de sal y de pimienta. Reservar.
- Cortar el solomillo en láminas muy finas con un cuchillo bien afilado.
- Para emplatar, servir las láminas de carpaccio de ternera marinada en un plato y decorar con unas hojas de rúcula y unas escamas de queso mahonés. Aliñar con el aceite de pistacho y espolvorear unas semillas de sésamo negro.
INGREDIENTES
500 g solomillo de ternera Ca Na Paulina
50 g de queso mahonés Ca Na Paulina
1 chalota
1 diente de ajo
2 g de jengibre
½ limón
40 g de pistachos pelados
40 g de azúcar panela
60 ml de
vinagre de arroz
60 ml de salsa de soja
1 guindilla
Rúcula fresca
Sésamo negro
Aceite de oliva
Sal
Pimienta negra